¿Que por qué te digo esto? Pues es sencillo; estos días nublados he pensado mucho más en ti, y me di cuenta de que te quiero, hasta los huesos y con el alma, pero mirando atrás a cada momento. Sé que juntos no somos como cualquier idílico cuento en el que todos son felices para siempre, somos mucho más, porque somos parte de una romántica ecuación que describe el fenómeno de entrelazamiento cuántico -claro que lo leí en Wikipedia porque la física y la química no se me dan-, porque somos dos individuos (sistemas), totalmente distintos, que se cruzaron y se separaron, pero de alguna forma seguimos estando conectados y siendo uno mismo, siempre será así, a pesar de la distancia y el tiempo...
Aunque hagas tu vida lejos de mí, y te enamores mil veces, "en cada comienzo, en cada adiós, en cada nota, en cada voz escucharás mi nombre, en cada acierto, en cada error, en cada beso sin amor invocarás mi nombre", y sin embargo deseo con todas mis fuerzas que encuentres la felicidad y la calma, que siempre quise y no pude darte.
Qué tengas suerte...
Con amor, She.